jueves, 11 de noviembre de 2010

MI CUADERNO DE BITÁCORA por Ermes E. Liriano C.




Bitácora del capitán, 6 de noviembre: El carro de mi Tío.


Iba saliendo de casa y me encuentro con mi tío que viene bajando en su carro: “¿Pa’ donde vas, muchacho?”. Me imaginaba que quería encaminarme pero yo iba para un lado y él para otro, y yo no quería retrasarlo. Intenté rechazar la oferta pero él con toda la confianza/autoridad de un tío me hizo montar en el carro, y en el camino me reprochó el desaire que le pensaba hacer: “¿Acaso no somos familia? ¿Cómo te voy a dejar andar a pié?”.

Cuando bajé del carro, me quedé pensando en el gesto tan sencillo que él había tenido conmigo. Yo sé que no es para tanto, pero eso de que somos familia me hizo recordar al buen samaritano. Aquella persona que es capaz de acercarse a la orilla del camino, cambiar su ruta para no dejar en el umbral de la muerte a un ser humano.

Yo creo que el buen samaritano y, en este caso, mi buen tío también, nos enseñan por qué tenemos que hacer el bien a los demás (aunque nos hagan el desaire). No hay una razón más bonita simplemente: Somos familia.


1 comentario:

Anónimo dijo...

ola, capitan Ermes, me gusto su cuaderno. Pero me surgen 2 dudas: tu dices q todos somos familia, pero te pregunto: ay que dar una bola en tu carro a todo el que te lo pida, y dos: ay q montar en el carro de todo el que te invite a subir? pq las cosas en nuetro pais no estan fasiles, verdad? aclaramelo, gracias.