viernes, 3 de agosto de 2012

Con Otras Palabras por Pabel Alba

Apaga y vámonos


Lo he tenido presente desde antes de saber la noticia. Era una crónica de una muerte anunciada. Lo iba a preparar antes, pero no me había animado. Simplemente no era el momento. Este lo es.

Hemos vuelto a decir que sí. Queremos corrupción, delincuencia, ignorancia, pobreza, hambre, abuso de poder, maltrato, esclavitud, apagones, enfermos…

En varias ocasiones lo he dicho y aún lo sostengo. No pertenezco, no soy afín, ni estoy inscrito en ningún partido político. No soy morado, ni blanco, ni rojo… de ningún color. Sí soy un ciudadano que quiere vivir en un país mejor, donde la gente se sienta orgullosa de lo que tiene y donde la necesidad no les lleve a cometer actos vandálicos y/o a emigrar del país.

Creo en un país donde seamos iguales dentro de las diferencias. Donde tú y yo podamos gozar de un servicio de salud digno de humanos. Donde podamos sentarnos a la mesa diariamente a compartir los alimentos y que estos gocen de una calidad optima para su consumo. Quiero vivir en un país donde no se vaya la luz. Donde no se censure a quienes se quieran expresar con libertad. Un país donde los dominicanos seamos los protagonistas en su desarrollo, capacitándonos para ello, pero sin tener la impuesta “ayuda” y colaboración de países explotadores.

Pero no quiero pensar que soy el único subnormal que añora un país sencillamente frutal. Fluvial. Y material como lo soñó el poeta.

Hemos de tener coraje ante la indiferencia de quienes nos gobiernan. Debemos aprender a jugar un papel diferente en la sociedad. No sé trata de criticar, sino de actuar.

Seguimos votando igual. Más de lo mismo. Danilo, Margarita, Leonel… hemos decidido no progresar. Y no precisamente el progreso que nos vendieron y que nos seguirán vendiendo, sino un crecer como país, como personas. Capaces de construir y de compartir, de manera justa, la riqueza que posee nuestra querida tierra.

Es posible que la otra opción haya sido peor. Pero siempre optamos por la mediocridad, elegir el mal menor y por ello estamos como estamos. Nuestra postura radica en hacer frente a las políticas de nuestro país, a los políticos. Hacerles ver que su sistema de gobierno no nos convence ni nos favorece y que necesitamos de una vez y para siempre, cambiar.

En fin, podré decir todo lo que quiero y más. Me puede servir de desahogo mientras tenemos que aguantar cuatro años de lo mismo y peor. Un poder judicial a la medida. Un poder legislativo seleccionando lo mejor del Partido y un ejecutivo con la capacidad y disposición de vender el país, si fuese necesario, para conseguir sus propios beneficios. Y de la sociedad civil. Mejor ni hablar.

Apaga y vámonos. Que es lo mismo otra vez. ¡Vete y haz tú lo mismo!

No hay comentarios: