domingo, 3 de julio de 2011

3/7 Evangelio y Vida por Fr. José Muñoz, mercedario

SABIDURÍA POPULAR

El padre iba feliz con su hijo por aquellas veredas, orgulloso de lo que podía enseñarle. Días atrás habían aterrizado en el aeropuerto y el padre ya le había dicho con insistencia que no iban a convertirse en vulgares turistas. Él había estudiado en profundidad la cultura y quería comprobar in situ cada cosa. Y no lo iban a comprobar si se quedaban en Punta Cana entre el hotel y la playa rodeados de extranjeros, tenían que ir al pueblo.

Por eso iban caminando por el sendero, y ya hacía algunas horas que no se habían cruzado con nadie, al coronar una colina divisaron a un paisano recostado en un árbol, que parecía dormir porque se sujetaba la cabeza con la mano.

Cuando se acercaron, el papá le pregunto si les podía guiar y explicar los lugares interesantes de la zona.

El paisano dijo que no, porque ahora mismo acababa de morir su cuñado y tenía que volver a casa que estaba a diez kilómetros.

¿Y como puede saberlo?- dijo el niño si aquí no hay nadie.

El papá echando mano de su erudición cultural le dijo, ellos tienen un refrán que dice “Si todas las gallinas cacarean al mismo tiempo ocurrirá una muerte en la familia”, y por allí se ven unas gallinas.

El paisano dijo: no es así.

Pues será este otro que dice: “si un perro aúlla con insistencia alguien morirá en el vecindario”.

Nada de eso- insistió el paisano.

Puede ser que el cuñado “tuviera dos luces encendidas en la misma habitación que ocasiona muerte” y lo vio esta mañana.

Ni pensarlo, solo nos dan luz a las tres de la tarde.

Pues me rindo debe ser por un medio que no he estudiado.

¿Y como lo supo? preguntó el niño al paisano.

Muy sencillo mi hermano, me lo comunicaron por este celular.

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