jueves, 25 de noviembre de 2010

MI CUADERNO DE BITÁCORA por Ermes E. Liriano C.


 
Bitácora del capitán, 19 de noviembre: Por la hermana de un amigo


Aquél día, conversaba amenamente con un compañero de clase. Él es de muy lejos, y en sus palabras yo podía entre-escuchar la nostalgia: él extrañaba su familia y su tierra. El tema fue avanzando y comenzó a hablarme de su familia. En su país, las familias todavía son numerosas, él pertenece a una familia de siete hermanos y una hermana.

¡Qué alegría yo sentí!, pues pude hacer que él se transportara por un momento a su tierra, a su hogar por medio de los detalles que me iba contando. Sin embargo, no me fue posible escucharle hablar de su hermana… ella ya no estaba. No quise preguntar, soy muy inexperto en esos temas. Él, haciendo uso del español que iba aprendiendo, me dijo: alguien usó “puazón” contra ella. Esto quiere decir que lamentablemente, su única hermana había sido envenenada…

Un silencio profundo interrumpió la conversación; en esos instantes pensé en mi única hermana, y en su valiosa vida. E inevitablemente pensé en la maldad, aquella maldad que todos somos capaces de hacerle al otro y que tanto sale en los periódicos. Sentí muchas ganas de ser buena noticia, de ser evangelio, de ser vida. Creo firmemente que el amor puede más que el odio, y que la vida triunfa sobre la muerte; pero no es suficiente con creerlo. Hace falta algo más...


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