Con Otras Palabras por Pabel Alba Hernández

El encuentro de la felicidad

Muchas veces nos llegan momentos buenos en nuestra vida; momentos que nos animan a seguir adelante; momentos donde encontramos la presencia de Dios en nuestra vida y también momentos donde encontramos las riendas de nuestro camino hacia la felicidad.

Hoy como algo muy inusual les contaré desde mi propia experiencia como pueden ser esos momentos. Hace algunos días, específicamente cinco días, se me presentó la posibilidad de compartir con la capilla que nosotros atendemos en Villa Aura, la celebración de la palabra. Y yo sin experiencia alguna me lancé hacia esa nueva aventura.

La celebración estaba pautada para las 8:30am, pero yo como si fuera un niño al momento de recibir los regalos del día de reyes, me desperté bien temprano, 6:00 a.m exactamente puesto que no podía conseguir el sueño debido a la euforia que llevaba por dentro.

Luego de la preparación previa a la celebración me dirijo hacia la capilla y me encuentro con la enorme sorpresa de que estaba completamente repleta de personas, hasta fuera de la misma estaban sentados en sillas plásticas. Mi primera reacción al ver toda esa gente y como primer día de celebrante en mi vida fue de miedo total.

Las personas de la comunidad me reciben con gran alegría lo que hace que se desvaneciera en mí, parte del miedo impuesto por la primera impresión. Se inicia la celebración y fue el momento donde, si existía algún tipo de miedo, se extinguió por total. Dios me dio la capacidad de desenvolverme, interactuar y compartir con la comunidad como si no fuera la primera vez. Ya al termino de la celebración una de las personas que siguen miércoles tras miércoles este espacio (Hna Iluminada) decide en nombre de la comunidad darme las gracias por haber compartido dicho espacio con ellos. Ver a aquellas personas dándome las gracias y animándome a seguir adelante en este camino me llenó de alegría y satisfacción.

Traigo esta historia a colación, mi historia, porque al igual que yo todos pasan por este momento. Dios tiene un llamado para cada uno de nosotros, Dios nos tiene un lugar donde podemos ser felices. Pero lo importante es saber ver y escuchar con nuestro corazón, donde está ese lugar que Dios nos quiere regalar.
Él quiere la felicidad de cada uno de nosotros, pero quiere que le elijamos a él como base de nuestra vida y a través de él todo se nos dará. Todos estamos llamados a una vocación, yo me siento feliz al ver como día tras día descubro como Dios me llama a la vida religiosa, en comunidad, este espacio donde soy completamente feliz, a entregarme de una forma distinta por los demás. Tú también estas llamado a una vocación sea religiosa, sacerdotal, matrimonial, laico comprometido. Lo importante es saber interpretar los mensajes de Dios.

Lo que quiere Dios para nosotros es que vayamos al encuentro de la felicidad, y que seamos felices. Yo, día tras día le doy el Sí a Dios en la vida religiosa, el Sí de ser mercedario para los demás, de vivir en comunidad. Tú también debes buscar tu felicidad y decirle Sí a la voluntad de Dios. ¡Vete y haz tú lo mismo!

Posdata: Anexo un enorme GRACIAS para la persona que me inspiró sin darse cuenta a escribir esta reflexión, Iluminada. Gracias por la fidelidad con que visitas nuestro blog, por expresarme lo importante que son para ti mis comentarios, por la acogida que me diste y me dieron en la capilla el domingo. De corazón gracias!!!