viernes, 5 de febrero de 2010

Evangelio y Vida/ Domingo 7 Enero: ¡YO, PESCADOR DE HOMBRES! por Fray José Muñoz, mercedario

“Os haré pescadores de hombres”, no se cansaba de repetirlo. Alberto había salido entusiasmado de la iglesia, ¡con que fuerza y energía había pronunciado el Padre esas palabras!, claro no eran suyas sino de Jesús.
Pero esas palabras también eran para él, con sus 19 cumplidos bien podía entenderlas, más de una vez, había contemplado a los pescadores en el puerto o en la playa arrastrando las redes o tensando el sedal para capturar los peces en una tarea paciente y esforzada.
¡Pero pescar hombres!, ¿Estaría él a la altura?, ¿Y cómo se pescan personas para Jesús?, ¿Tenía él la fortaleza para cumplir tamaña misión?
Era difícil, pero asumiendo parte de las cualidades del material de los pescadores podría madurar y entenderlo. Siendo….
…delgado y resistente como la caña de pescar, con un criterio sólido pero flexible para aceptar el diálogo.
…amplio y extenso dispuesto a llegar al rincón más alejado como el sedal, pero maleable para adaptarme a las situaciones y personas que encuentre en mi camino.
…acerado y filoso con una fe a prueba de golpes como el anzuelo pero dispuesto a zambullirme en el mundo borrascoso sin miedo a dejarme ahogar por los problemas.
…lleno de vida como el gusano de la carnada, pero dispuesto al sacrificio por el bien de los demás.
…complejo y abarcador como la red, pero fácil de colocar en cualquier rincón sin demasiadas exigencias.
… acogedor como la canasta para recibir al pez herido y acompañarlo en los momentos más difíciles como a tantas otras personas que llegan a nuestro lado con el cuerpo y el espíritu destrozado.
El camino es difícil, pero no es imposible el intento y con la ayuda de Jesús estoy dispuesto a emprenderlo.

No hay comentarios: